Uno de los principales propósitos al comenzar el año es tener una vida más saludable, ya sea comer más sano o comenzar a hacer ejercicio. O retomar aquella rutina que nos permiten tener un equilibrio en nuestra vida. Y claro está, el comenzar a correr; aquí te compartimos algunas cosas a considerar para aquellos runners principiantes.
Correr con frío
Primero debemos crear una rutina de ejercicio que sea llevadera y acorde con las posibilidades de cada persona. Eso sí, hay que tener muy presente las bajas temperaturas a inicios de año.
Te aconsejamos aprovechar el clima cálido para evitar lesiones o algún resfriado y tomar en cuenta las prendas a usarse, en nuestra tienda en línea podrás encontrar el outfit perfecto para disfrutar de tu rutina sin morir de frío.
Crear una rutina de entrenamiento
Para iniciar conviene marcarse una meta de salir al menos tres veces a la semana y convertirlo en una rutina de entrenamiento pues solo de ese modo el cuerpo se habituará al ejercicio continuo. No obstante, los primeros días no es conveniente ponerse a correr si se lleva mucho tiempo sin hacerlo.
En este caso, comienza por caminar durante media hora a un paso rápido, logrando una media de 3 kilometros cada 30 minutos, por supuesto, no debes olvidar los estiramientos tanto al comienzo de la actividad como al final. Así cuidarás de tus músculos y prepararás el cuerpo para los siguientes días de ejercicio.
Tener paciencia y ser constante
Los primeros días al salir a correr, se debe llevar un ritmo lento, que ayude al cuerpo a habituarse. Además, si no se tiene la suficiente resistencia, es mejor realizar tandas cortas durante la sesión de carrera. Poco a poco serán menos necesarias hasta que se pueda correr sin parar. Asimismo, hay que cuidarse de no caer lesionados por culpa de un sobreesfuerzo al que no se está habituado y tener la paciencia para no dejarlo a la primera.
Hoy en día contamos con aplicaciones que nos ayudan a medir el ritmo cardíaco y los kilómetros que vamos llevando, ir poco a poco sin perder la constancia y siempre manteniendo una rutina en la que no se exponga al cuerpo a esfuerzos que no puede aguantar, correr de un modo relajado, así irás creando la rutina adecuada para tu cuerpo. (Recordemos que no todos los cuerpos responden igual).
Hay que descansar
Cuando se comienza a correr también debemos tomar en cuenta que el cuerpo tiene que descansar y recuperar energía para continuar con la rutina. La adaptación a las nuevas condiciones requiere un descanso que no se puede pasar por alto y tener una buena hidratación.
No por correr todos los días se va a alcanzar antes la forma. Hay que “escuchar” al cuerpo y descansar cuando sea necesario. De lo contrario, pueden llegar las lesiones que acaben con el ejercicio y, posiblemente, con el objetivo de empezar a correr de una manera continua.
¡Aplica estos consejos en tu rutina al correr y compártenos tu experiencia! En nuestra sucursales físicas y en línea encontrarás todo lo necesario para convertirte en corredor.